Alberto García-Alix


Noche en Badajoz

Ana Curra


Alberto García-Alix. Fotógrafo español nacido en León en 1956. Premio Nacional de Fotografía en 1999, García-Alix expuso por primera vez en la Galería Buades en 1981. Su obra recorre diversos países. Destacan sus retratos en blanco y negro, con series dedicadas a las motos, los presos, las estrellas del porno, los yonquis y los tatuajes. Fue uno de los protagonistas más destacados de la llamada Movida madrileña. Amante de las motocicletas y de los retratos sus cámaras Leica y Hasselblad han inmortalizado a importantes artistas nacionales e internacionles. Harleys, Tatuajes, Música y la noche han sido sus musas de inspiración.


Las fotos que aquí expongo hacen parte de la exposición llamada: "Llorando a aquélla que creyó amarme", reúne dos décadas de trabajo fotográfico, y lleva como título un verso de Samuel Beckett seleccionado por el propio fotógrafo, posiblemente como leivmotiv nostálgico sobre la pérdida y la incertidumbre que representan esas imágenes como fragmentos de episodios vividos, recuperando así una sensibilidad más emotiva para el retrato contemporáneo registrado en blanco y negro.

Blanca Li



En el catálogo de esa muestra dice textualmente: “cualquier exposición de Alberto es siempre autobiográfica, aunque poco importa lo que sea de verdad porque, además de su propia historia, lo que relata es la historia de toda su gente, de su tiempo”. Y ciertamente, ingresamos en el campo representacional porque no está en juego la verdad sino el deseo de imponer una mirada al margen. Los referentes autobiográficos son un pretexto para desenmascarar las políticas de representación y desestabilizar la imagen del sujeto “soberano” propiciada por el tradicional género retratístico, y desde la oblicuidad, poder indagar sin pudor en la intimidad, en la complicidad entre las miradas, que en el caso de los sujetos seleccionados por García-Alix, develan el deseo de estar allí, en el centro.


Esta exposición, que privilegia principalmente el universo de lo femenino, nos enfrenta a los límites del erotismo, transgrediendo el desnudo clásico y a la vez, a la pornografía, porque las imágenes quiebran las poses estereotipadas, características en este género, distanciándose de sus esquemas habituales del espectáculo sexual.

Las diferencias entre erotismo y pornografía pueden ser sutiles, de grado, pero se puede plantear que la especificidad de la pornografía, en su accionar mecánico y serial, radica en su ámbito de circulación como objeto básicamente mercantilista de la sexualidad, donde los sujetos son apreciados como meros objetos de goce, sin hacer énfasis en los rasgos de su personalidad, a diferencia de la operatoria que despliega García-Alix.

Este trabajo, que mezcla residuos de una memoria personal y la teatralidad del mundo cotidiano, expresa la mirada cómplice y generosa del fotógrafo que reposa en la complacencia de sus interlocutoras.

Ellas se identifican en las imágenes escogidas, aunque según relata el fotógrafo, a veces él les roba un gesto para mostrar aquellas facetas de sus rostros que quieren ocultar. Sus retratos registran ese yo estallado y fragmentado en múltiples facetas y aunque parecen organizarse según una narrativa singular -cuando registra a la mismas personas en varias poses o selecciona un lugar o un objeto- finalmente esas posibles historias carecen de importancia pues el espectador queda cautivado por el orgullo misterioso que ejercen esas miradas a través de la frontalidad de la cámara.

"Llorando a aquélla que creyó amarme" puede parecer una exposición controversial porque invita a observar el cuerpo desnudo desde perspectivas poco convencionales, pero este recorrido en el fondo es un pretexto para reconocer en esa desnudez, el compromiso visual con la personalidad de individuos que se enorgullecen de ser diferentes.



Fuentes: Wikipedia y Carmen Hernández
Dirección de Artes Visuales - Fundación Celarg.


Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Cómo molan estas fotos. Creo que hay algo de este señor expuesto en el Artium, o algo he visto de él, porque me suena. pero con mi memoria de pez, no soy capaz de acordarme.
Un besazo!
Anónimo ha dicho que…
Genial tu blog, me encantó, es puro arte, y lo bueno es que aquí no hay censura, y se puede mostrar mucho mas , y ver con calma.


Felicidades señorita, me tendrá seguido por éstos lares, me encanta...


Le dejo un trillón de besos
Anónimo ha dicho que…
Hola
Gracias por agregar nuestro banner en tu blog..
Pondremos tu link en el nuestro
=)
Por cierto..
Tu blog me encantoo..
Saludoos

Lucciana NOmi